lunes, 26 de junio de 2017

ISLA DE LOBOS de José Vicente Pascual



Título: Isla de lobos

Autor: José Vicente Pascual

Editorial: Versátil

Primera edición: Octubre de 2016

Nº de Páginas: 220

ISBN: 9788416580538

Género: Histórica, ficción




Autor

José Vicente Pascual  nacido en Alcalá de Henares en 1956 es un escritor español que utiliza también los seudónimos de José Ferrer y José Ferrer Bermejo.
Ha vivido en Granada durante mucho tiempo, aunque también ha vivido en Barcelona, León y Sevilla. Actualmente tiene su residencia en La Coruña.
Ha colaborado en diversas publicaciones periódicas y generalistas. Desde 1997 a 2008 ha sido colaborador del diario IDEAL de Granada, con secciones semanal y quincenal. Desde enero de 2009 ha sido colaborador de La Opinión de Granada, con las secciones Del caño al coro y El reinado de Witiza. En la actualidad mantiene el blog Lejos de Itaca, opinión y reflexión, en la revista digital El Manifiesto. Colabora asiduamente con la edición impresa de Pliegos de Alborán, suplemento literario de El Faro de Motril, así como con la revista digital Tendencias 21. 

Es autor de numerosas novelas y libros de relatos. Entre sus obras destacan La montaña de Taishán (Premio Azorín 1989), El capitán de plomo (Premio Café Gijón, 1993), Palermo del cuchillo (Premio Alfonso XIII, 1995; Ediciones B, 1996), Juan Latino, El país de Abel (finalista del Premio Nacional de la Crítica, 2002), La diosa de barro, Homero y los reinos del mar (finalista del Premio Caja Granada de novela histórica, 2009), Los fantasmas del Retiro, La hermandad de la nieve (Premio Hislibris a la mejor novela histórica y mejor autor, 2012), y Almirante en Tierra Firme (Premio Hispania de novela histórica, 2013)..
Es miembro de la Academia de Buenas Letras de Granada.

Sinopsis

Hombres de mar habitan el enclave de Isla de Lobos, al que llega un náufrago sin memoria pero con pasado. Poco más que una lengua de lava y piedras negras, un peñasco entre mares es aquel lugar, donde son personajes principales un geógrafo, un santero, un contador de olas y una señora que gobierna con mano de hierro los destinos de la ínsula, además de la mulata Esmeralda y su hija Albabella, que habla con los lobos de mar y vive en una gruta.

Y un volcán que vigila los designios de cuantos moran ese espejismo del tiempo, el pequeño retal de tierras y escolleras en mitad del océano, poco más que un grano de mostaza caído sobre el inmenso mantel del mar.

En ese universo de clausura, sobre el que pesa una maldición ineludible, la aparición de un hombre sin nombre y desnudo sobre la arena de la playa, arrojado por el oleaje, supondrá una amenaza que tratarán de conjurar imponiéndole una tarea casi imposible. Mientras le da cumplimiento, fuerzas mayores que las de un mortal trabajan calladamente para cambiar el destino de Isla de Lobos, ese confín que no aparece en los mapas y casi no está en el mundo.

Opinión

Este libro llegó a mis manos como premio de un sorteo del reto Ciudades con libro que organizaron el año pasado los blogs El Búho entre libros y Leyendo en el bus. Lo he rescatado para el mes temático de la novela histórica que organiza el blog de Laky Libros que hay que leer, como podéis ver, se entre blogs anda el juego.

Ante todo tengo que aclarar que este libro es un libro histórico por la ambientación que ha creado el autor, aunque tanto historia, personajes y la propia Isla de Lobos son ficticios, por la atmósfera que nos describe y los hechos que se dan allende sus fronteras, se puede deducir que está enmarcado en el siglo XVIII. 
Las coronas española, francesa e inglesa no están precisamente interesadas en una extraña isla habitada por aún más extraños personajes. Se trata de un islote no demasiado amplio, situado en el Océano Atlántico que utilizan los barcos para aprovisionarse de agua y comida en sus largos trayectos, pero ojo ahí a desembarcar y formar parte de la isla, difícilmente podrán salir de ella. 
Se verán envueltos en una especie de conjura que hará que no puedan salir de sus límites. Sus playas sirven de caladero natural para los Lobos marinos que tienen allí un remanso de paz y tranquilidad, de vez en cuando y si la población aumenta se produce una caza de estos animales y se aprovecha todo de ellos.

Allí el tiempo no se mide como en el resto del mundo, allí tienen un curioso calendario en el que los años son nombrados por aquellos acontecimientos que han marcado la vida de sus habitantes: El Año que nevó en Mataflores, el Año de la Moscarda, el gran Año del Rescate, el Año del Inglés.

La acción transcurre precisamente durante el Año del Náufrago, porque un hombre sin memoria agarrado a una tabla llega a Playa Grande, donde Ramiro el contador de olas y vigilante de lobos lo acogerá y una vez que esté algo repuesto lo llevará ante la presencia de la máxima autoridad de la Isla, Doña Aguas Santas Rivero.

El miedo y la desconfianza se apoderarán de esta mujer, viuda del Excelentísimo Augusto Rivero que dirige con puño de hierro la vida de la isla. Administra justicia y encarga labores, ayudándose de un imponente matón polaco Jaruzelski que ejecuta sus órdenes sin dudar, y que se ve asesorada en el Tribunal de Justicia situado en la sala de Riñas y Tumultos, por el sanador Sanaperros, el geógrafo Don Sebastián e incluso cuando tiene a bien, pregunta a su opinión al presbítero de la iglesia de San Atila, Don Manuel de Garceses.

La identidad de este náufrago será un enigma pronto resuelto por Albabella, bella e intrigante mujer casi sirena que habla con los lobos marinos y cuya madre Esmeralda llegó a la Isla tras un curioso periplo y acabó formando parte de la vida social de esta, de una forma impactante.

Como ya he dicho todos estos personajes andan por la isla esperando no se sabe muy bien qué, o dejando pasar el tiempo, pero el autor nos tiene reservadas unas cuantas sorpresas y acabaremos conociendo el porqué de las relaciones, qué ocurre y en qué terminará el futuro de una isla en la que no nacen niños, pero tampoco hay cementerio porque nadie muere allí de forma natural. Iremos conociendo sus procedencias y sus aventuras, mientras nos acercamos a un final sorprendente.

Con un lenguaje lleno de florituras irónicas y de palabras inventadas que te sacan más de una sonrisa, el autor manda a un narrador algo cascarrabias a contarnos la historia, y lo hace de una forma seductora, tranquila, enseñándonos a donde puede llegar la ambición de un personaje como es Augusto Rivero ante la desidia de sus compatriotas y demás habitantes de un trozo de tierra coronado por un enigmático volcán de la que lo único que sabemos ciertamente que a la Isla de Lobos se llega, pero de la isla no se sale.

Una novela que es enorme metáfora llena de alusiones a personajes literarios y mitológicos que ha sido Ganadora del Premio Valencia de Narrativa en Castellano 2016 que otorga la Institución Alfons el Magnànim, y que recomiendo para comenzar a descubrir a este autor del que aún tengo varios libros pendientes.

Una pequeña gran joya.


Saludos y a disfrutar leyendo.